Qué tipo de conductas sanciona la Ley Karin

¿Qué tipo de conductas sanciona la Ley Karin?

La Ley 21.643 (Ley Karin) ha generado diversas interpretaciones respecto a qué situaciones específicas pueden ser consideradas como violencia, acoso laboral o acoso sexual en el ámbito laboral. Una de las dudas más recurrentes es qué tipo de conductas pueden ser sancionadas bajo esta normativa y qué criterios se utilizan para determinar si una acción o comportamiento es sancionable.

Este artículo busca aclarar qué conductas pueden ser investigadas y sancionadas bajo la Ley Karin, qué elementos se toman en cuenta para su evaluación y cómo las empresas deben actuar ante situaciones de riesgo.

¿Qué sanciona la Ley Karin?

La Ley Karin no establece una lista cerrada de conductas prohibidas, ya que cada caso debe analizarse considerando su contexto, impacto y gravedad. Ya lo señalábamos en el artículo publicado anteriormente “Ley Karin, ¿18 conductas?”. En lugar de un catálogo fijo, la ley define tres categorías principales de conductas sancionables:

  1. Violencia laboral
  2. Acoso laboral
  3. Acoso sexual

1. Violencia en el trabajo

La violencia laboral se refiere a actos de agresión física o psicológica que generan daño o sufrimiento a un trabajador en el ejercicio de sus funciones. Puede provenir de superiores, compañeros o incluso terceros ajenos a la organización, como clientes o proveedores.

Algunos Ejemplos de violencia laboral sancionada por la Ley Karin

  • Agresiones físicas: golpes, empujones, empujones o cualquier acto que cause daño físico a un trabajador.
  • Amenazas: advertencias explícitas o implícitas que generen temor en la víctima, incluyendo amenazas de despido injustificado.
  • Insultos y humillaciones públicas: gritos, descalificaciones, comentarios ofensivos dirigidos a menospreciar a una persona en su entorno laboral.
  • Violencia de terceros: clientes, usuarios o proveedores que ejerzan violencia contra trabajadores en el ejercicio de sus funciones.

Ejemplo: Si un supervisor golpea el escritorio de un trabajador mientras le grita amenazas, esta conducta puede ser considerada violencia laboral.

2. Acoso laboral

El acoso laboral implica, resumidamente, conductas que buscan desestabilizar emocional o profesionalmente a una persona dentro del ámbito laboral.

Ejemplos de acoso laboral sancionable

  • Hostigamiento sistemático: burlas, menosprecios o aislamiento intencionado de un trabajador.
  • Sobrecarga laboral injustificada: asignar tareas desproporcionadas o establecer exigencias inalcanzables para desestabilizar a un empleado.
  • Negación de información clave: ocultar datos fundamentales para el desarrollo del trabajo con el fin de afectar el desempeño de un colaborador.
  • Sabotaje o exclusión social: impedir deliberadamente que un trabajador participe en reuniones o actividades importantes.

Ejemplo: Si un jefe sistemáticamente ignora las consultas de un trabajador, lo excluye de reuniones y le asigna tareas imposibles de cumplir con el fin de que renuncie, esto puede ser considerado acoso laboral.

3. Acoso sexual

El acoso sexual en el trabajo se define como cualquier conducta de connotación sexual, verbal o física, no deseada por la víctima, que cause incomodidad o afecte su desempeño laboral.

Ejemplos de acoso sexual sancionado por la Ley Karin

  • Comentarios o insinuaciones sexuales: expresiones con connotación sexual que generen incomodidad en la víctima.
  • Contacto físico no consentido: tocamientos, roces o gestos invasivos de naturaleza sexual.
  • Uso de material sexual en el trabajo: compartir imágenes, videos o mensajes con contenido sexual sin consentimiento.
  • Condicionar beneficios o sanciones a favores sexuales (quid pro quo)

Ejemplo: Si un jefe condiciona la promoción de una trabajadora a aceptar invitaciones personales con insinuaciones sexuales, esto constituye acoso sexual bajo la Ley Karin.

Para que una conducta sea considerada sancionable, debe cumplir con ciertos criterios establecidos por la ley, que incluyen:

Frecuencia:

  • Un solo incidente puede ser grave si es de gran impacto, en la legislación anterior se consideraba el hecho de que fuera frecuente y reiterado, sostenido en el tiempo, hoy basta que sea una vez para que el afectado considere el hecho como acoso.

Impacto en la víctima:

  • Se analiza si la conducta ha generado afectación psicológica, emocional o profesional en la persona afectada.

Asimetría de poder:

  • Si la conducta proviene de una persona con autoridad sobre la víctima, puede agravar la situación.

Entorno y contexto:

Se evalúa cómo las acciones han afectado el clima laboral y si han generado un ambiente hostil o inseguro.

¿Qué deben hacer las empresas para evitar estas conductas?

  • Implementar protocolos de denuncia y actuación: Debe existir un canal claro y confidencial para reportar incidentes.
  • Capacitar a los trabajadores y líderes: Es clave que todos comprendan qué es acoso o violencia y cómo prevenirlo.
  • Promover una cultura organizacional de respeto: Generar un ambiente seguro donde estas conductas sean inaceptables.
  • Actuar con rapidez y objetividad: Toda denuncia debe ser investigada y tratada conforme a la ley.

La Ley Karin no prohíbe conductas específicas en una lista cerrada, sino que evalúa el impacto y contexto de cada situación. Las empresas y trabajadores deben conocer qué comportamientos pueden ser considerados sancionables y actuar de manera preventiva para garantizar un ambiente laboral seguro.

En ILIA Consultores, con nuestra metodología de Organización Resiliente, ayudamos a empresas a implementar protocolos efectivos de prevención y gestión de denuncias, asegurando el cumplimiento de la Ley Karin. Si necesitas asesoría, contáctanos y fortalece la cultura de respeto en tu organización.